viernes, 22 de agosto de 2008

Amigos


"Siempre he dicho que prefiero una amistad a tener una pareja".

Amigo: Ser leal, constante, que permanece a tu lado en todo momento, que cuando hay problemas el auténtico amigo está allí, a tu compañía, auxiliándote, ambicionando batallar junto a ti, proporcionándote un soporte.

Cuando son los buenos instantes..., un amigo es el sujeto que más te puede contentar. Los sentimientos son insignes, puros. Es aquí en donde uno puede manifestarse como humano, ser sensible consumadamente, con sus virtudes-defectos.

Ellos sacan lo mejor de uno, nos conocen tan bien que cuando perdemos nuestro horizonte ellos nos lo recuerdan.

El amigo no demanda mucho, solo que le seas franco. 

La auténtica amistad jamás finaliza, al pasar los años, las experiencias diversas. Nada abate lo cimentado en una seria amistad, salta de ser un conjunto de intereses compartidos a ser fracción de tu vida, un pedazo de ti.

La amistad no es comparable con ningún otro sentimiento, normalmente se dice que el amor es una categoría más avanzada que este, pero para mi son cosas distintas, en el amor que es grande hay superficialidad, sentimientos que quieran o no son fútiles. En este no los hay, no hay caras que te induzcan a fundar una relación, sino un manojo de cosas en común y con eso basta.

Hablado ya de la amistad, me antojo consagrarle unas líneas a ciertas personas que han sido muy especiales para mí, sin importar que conserve o no el contacto actual con ellos, pues han sido algo exclusivo en mi existencia.

El primer lugar se lo lleva indiscutidamente mi mejor amiga, Constanza: Ente con la que he compartido los momentos más gratos, amenos, jubilosos. Ella es quien de tantas sonrisas, carcajadas ha sido dueña. Conversar con esta persona es siempre un goce. 

Estaría garabateando toda la noche si fuera necesario por mis amigos, que los valoro, los aprecio con mucho valía.

Lo más paradójico que me ha ocurrido en la vida es conocer y alcanzar amistad con gente que partí conociéndola sin conocerla, me explico, gente de los chats. Quién apuntaría a que se logra querer a alguien por un mero "MSN"... Ah!, que chiflada es esta existencia, tan atesta de asombros.

Tantas formas de labrar una amistad, tantas formas de conocer gente... y aquí estoy, borroneando y regalándoles un par de vocablos que aspiran pronunciar mi colosal estima.

Agradezco a cada individuo con quien he compartido y me ha adjudicado un soplo de sí.

sábado, 16 de agosto de 2008

La Playa


Estoy en la playa, recorriéndola solo, contemplando y regocijándome de la brisa, la siento suave por mi rostro, algo fresca, bufando como si quisiera contarme algo, como si fuera la voz de la naturaleza. Escucho el bramar de la mar, tan serena en esta tiniebla, en esta noche… me forja recordar lo solitario que estoy ante esta vida, pues al oír su canto entre tanta inmensidad me rememora mi vida, solo ante tanto infinito, me causa angustia, pero a la vez me da su tibieza, me conforta y me hacer sentir acompañado.
En las alturas puedo observar las estrellas como centellean ante mis ojos, tan colmas de vida, proporcionándole vida a este colosal y solemne océano, escoltándonos.

Sigo marchando por la arena, en esta playa, cuando derepente llegas tú, ser “divino” que apareciste en mi mundo, en el cual no poseo mucho y consigues enaltecerme a tu edén, me haces sentir tan colmado, completo que ya no aspiro más, pero sin embargo necesito de tu constancia, porque cuando no estás, retorno a mi soledad y veo mi realidad, únicamente permanecen las memorias, los gratos recuerdos, cuando me acompañabas y yo era feliz, conocí lo noble.

Tú, persona sencilla, humilde, generosa, que aun conservas cuantiosas buenas intenciones que la sociedad ya no tiene, te aventuras a venir a mí, no te puedo brindar mucho, solamente mi cariño. Soy una persona egoísta a veces, que me consume lo mundano de esta existencia, pero logro mudar de aires cuando te poseo a mi lado, en donde mis desconfianzas, temores, vacilaciones se esfuman, porque esos vacíos son llenados con toda tu totalidad. Posiblemente tu también tienes semejantes vacíos, pero juntos somos el complemento que necesitamos y juntos alcanzamos algo que se podría llamar como la perfección.

Un abrazo y una caricia es tan solo lo que necesito de ti, un beso tuyo excede a mi felicidad y tenerte junto a mí y compartirnos me saca de esta tierra, me traslada más allá, trasciendo y encuentro el sentido a mi vida.

lunes, 11 de agosto de 2008

El Poder de las Palabras


¿Quién dice que las palabras no tienen un efecto trascendental en nuestras vidas?

"Había una vez un caballero cruzando la calle, muy despistado y desconcentrado estaba. Sin saberlo y percatarse de la situación, viene un automóvil directamente a atropellarlo.

Una persona alcanza a darse cuenta que este señor no presentaba conocimiento alguno del vehículo y le dice: ¡Cuidado!, con sólo esta palabra, el individuo alcanzó a reaccionar y darse cuenta de la situación, salvando así su vida".

Este es un claro ejemplo de que una simple palabra puede hacer grandes cosas, las palabras dentro de todo lo etéreo pueden cobrar vida y hacerse presentes.

Humano, Demasiado Humano.


Viendo una serie norteamericana llamada “Queer As Folk” y atento a su desenlace tan alegórico me he puesto a pensar en mi vida común como la de muchos otros.

Les relataré brevemente la historia para que me comprendan:

“Estaba Justin, el joven de 18 años en su fiesta de graduación cuando llega Brian, su amor no-correspondido de 30 años y empiezan a bailar juntos siendo el centro de atención. Acto seguido se besan tiernamente y con sinceridad… espléndido.
Brian se despide de Justin y éste último le confiesa que ha sido la mejor noche que ha vivido en toda su vida, pues su amado ha llegado a verlo. Se marchan cada uno a sus destinos y en ese entonces llega un homofóbico compañero de Justin y le da un bate en la cabeza, Justin se desploma e inmediatamente es acudido por Brian quien alcanza a ver lo sucedido.
Lo llevan al hospital agónico, Brian anhela que viva Justin, pero es aquí cuando termina la historia”.

Mi conclusión: No puede ser más rica la historia pues evidencia un hecho que es vulgar en nosotros los humanos, porque nadie es como Justin, quien encuentra la felicidad a pesar de todo tipo de circunstancias.

Justin se enamora de quien no lo ama y es primeramente despreciado; para él es todo nuevo, todo especial y todo tiene un encanto único y a pesar de las experiencias que va viviendo en el transcurso de la historia él vive contento y conforme con tan sólo estar en contacto con su amor.

Esto pone a la vista cuán débiles, egoístas y víctimas somos, pues podríamos ser felices si supiéramos ser capaces de sacar lo bueno de cada hecho e intentar remediar lo malo, vale decir, dejar atrás nuestro constante querer de “disponer de las personas” como si nos pertenecieran. La vida no es así, nadie nos pertenece, sólo podemos compartirnos y he aquí nuestro mal concepto. Por lo general no compartimos sino que exigimos en vez de entregar. Estamos llenos de condiciones: “yo actúo acorde la otra persona”, pero como nunca damos un pie inicial nunca obtendremos algo de los demás, porque lamentablemente todos esperamos que otro de el primero paso… y una respuesta “equivalente” a nuestro primer paso es imposible, porque somos todos distintos ante situaciones iguales, similares y distintas; de esta manera, no podemos esperar, sólo debemos dar.

Luego, pasamos a un grado terrible pues nos victimizamos de los hechos y terminamos arruinando todo porque nos sentimos poco queridos… “Nadie te corresponde, nadie debe darte algo, nadie te debe algo”, por ende, es nuestra decisión el amar a anónimos y por esto mismo no podemos involucrar a otros en los resultados.

Por último, somos tan débiles que no tenemos perseverancia, agallas y una suficiente voluntad para seguir a cabo con nuestros planes, los reducimos a una simple “causa-consecuencia” que claro la vida funciona así en muchas formas, pero también existe lo abstracto, algo que no se puede ver y/o tocar y estar seguros de ellos. Es en este sentido que sólo tenemos una opción: hacer práctica de lo que es llamado “Fe” y confiar en nosotros mismos y en lo que hacemos, creer que es lo correcto y que si alguien dice amarme es porque así es y aceptar eso como lo grande que es.
Justin fue un muchacho que apreció y le dio un especial valor a cada cosa que por más ínfima él la convertía en algo magnánimo y esa es una lección que debemos aprender para poder alcanzar nuestra propia felicidad. Claramente esto conlleva un montón de angustias, pero nada que no sea superable porque ningún problema te mata, solo debes saber asimilarlo y fortalecerte de él.